Los datos hablan por sí solos: alrededor del 44% de las mujeres dicen sentir los primeros síntomas de la menopausia de manera temprana, para ser precisos antes de jubilarse. Así lo informaron tanto The Guardian como Madame Figaro mediante un estudio realizado por la Fawcett Society: el informe destaca las disparidades de género en el lugar de trabajo provocadas precisamente por esta situación. "Pero el hecho aún más importante es que el 80% de estas mujeres sienten estos síntomas unos siete años antes del último ciclo menstrual, por lo que los experimentan más tiempo que el promedio" , explica la Dra. Raffaela di Pace, ginecóloga y sexóloga.
Menopausia precoz, los datos del estudio realizado
Los resultados de este estudio se presentaron a principios de mayo durante un documental, Sex, Mind and the Menopause, que se emitió en la televisión británica. Una investigación realizada en lugares de trabajo involucró a 4014 mujeres británicas de entre 45 y 55 años y mostró que muchas de ellas experimentan la perimenopausia, es decir, los primeros síntomas de la menopausia, si es que aún no están en la menopausia.
Con todos los consiguientes cambios físicos y de hábitos. En concreto, el 84% de los entrevistados dijo tener problemas para dormir, el 73% sufría de sofocos y sudores nocturnos, el 69% dijo haber tenido momentos de ansiedad o depresión mientras que el 67% dijo haber sufrido el primer dolor articular.
A esto hay que sumar otros problemas menos conocidos como las palpitaciones cardiacas, que afectan al 41% de los entrevistados, y las infecciones urinarias al 39%.
Los efectos de la menopausia precoz en el trabajo
El resultado es que muchas mujeres se ven obligadas a tomar licencia por enfermedad; pero muchos, por confidencialidad o incluso por vergüenza, no explican el verdadero motivo y cuando lo hacen (sólo el 26%) motivan con trastornos de ansiedad o depresión. Todo ello, obviamente, incidiendo negativamente en su desempeño profesional: como afirman algunas de las entrevistadas, son bastantes las mujeres que han optado por trabajar a tiempo parcial (14%) y el 8% ha renunciado a un ascenso.
De hecho, aproximadamente uno de cada diez empleados habría renunciado a su trabajo precisamente debido a los síntomas premenopáusicos. Pero, además de los cambios físicos, muchas trabajadoras también han destacado cambios psicológicos que les han llevado a perder la confianza en sí mismas: el 41% ha sido víctima de "bromas" , rayanas en el mobbing, que han minado su equilibrio interior. .
Las causas de la menopausia prematura
«Los datos lamentablemente muestran un hecho muy cierto. Con la menopausia precoz, las mujeres pueden rendir menos en el trabajo, su compromiso intelectual puede sufrir y esto puede crear muchos problemas», confirma la ginecóloga.
Detrás del fenómeno de la menopausia precoz, existen diferentes causas: definitivamente un factor genético o puede surgir como consecuencia de enfermedades autoinmunes. Pero es cierto que para alrededor del 50% de las mujeres, la menopausia precoz es idiopática, es decir, sin causas precisas e identificables.
La memoria disminuye y la atención cae
Entre las consecuencias que trae consigo la menopausia precoz, ciertamente está la de una carencia progresiva de estrógenos y progesterona que, según estudios realizados, parecen estar asociadas a síntomas como cansancio extremo, pero también dificultades de atención y problemas de memoria, así como dolores de cabeza frecuentes y sensación de mareo. Todos los síntomas que dificultan el trabajo.
A esto también se pueden sumar los cambios de humor y el sueño irregular que, si pueden ser expresión de un estilo de vida personal, muchas veces también se deben a cambios hormonales, en particular a la bajada de serotonina, el buen humor, que favorece el estrés, el mal humor y la irregularidad en el descanso.
Por qué necesita un especialista
«Si es cierto que el estrés no es la primera causa de este problema, sin embargo, lo afecta negativamente: el malestar que uno siente provocado por los cambios hormonales y fisiológicos puede llevar a la mujer a relacionarse de otra manera y, a nivel profesional , ser menos eficiente. Esto también puede causar estrés que también puede manifestarse con insomnio e incluso ansiedad y depresión, aumentando así el cansancio y por lo tanto la sensación de confusión y dificultad para hacer las cosas. Entramos así en un círculo vicioso del que es más difícil salir sin la intervención de un especialista», concluye el Dr. Di Pace.
