La piel cambia con los años y a partir de los 30 necesitas fórmulas para el cuidado de la piel con virtudes antiedad. Es, de hecho, en este período de la vida cuando se notan en el espejo las primeras líneas de expresión y las pequeñas manchas en la piel. Es por eso que necesitas cambiar tu enfoque con productos específicos y una rutina de belleza diferente.
Cuidado de la piel después de los 30: ¿cómo cambia la piel?
Aunque en la década de los treinta la piel aún presenta un aspecto fresco y radiante, también es cierto que a partir de este momento los primeros signos de la edad comenzarán a hacerse visibles lentamente.
Las capacidades regenerativas de la epidermis empiezan a debilitarse a partir de ahora, pero, actuando con prontitud y con los productos adecuados, se puede frenar el envejecimiento de la piel.
Bastan unos pocos pero buenos cuidados extra, como aplicar siempre protector solar en el rostro o recordar aplicar la crema antiedad también en cuello y escote. Aquí, entonces, hay siete pasos fundamentales.
1) Limpiador delicado, para eliminar suavemente las impurezas
Tanto si la piel es normal, mixta, seca o grasa, el momento de la limpieza facial nunca debe incluir un cosmético agresivo que pueda agudizar algunos problemas cutáneos.
Mejor, por tanto, preferir fórmulas purificantes, a la vez delicadas y calmantes, para eliminar el exceso de sebo por la mañana y eliminar todo rastro de smog y maquillaje por la noche.
2) Sérum antifotoenvejecimiento con vitamina C
Rica en antioxidantes, la vitamina C es considerada un ingrediente superestrella de la rutina de belleza de mayores de 30 porque actúa sobre los daños causados por agentes externos como el sol y el smog.
Los sérums que lo contienen también se pueden aplicar durante el verano, siempre bajo la protección solar, para garantizar una protección extra de los rayos UV y estimular la producción de colágeno.
3) Protector solar, no solo en verano sino todo el año
La protección solar no solo debe aplicarse en vacaciones. En realidad, los rayos del sol dan en el rostro todo el año incluso en la ciudad, traspasando muchas más barreras de las que uno podría pensar: las nubes, los cristales de las ventanas, los tejidos de algunas prendas. Para ello siempre debes aplicar al menos un protector solar 30.
Para aquellos a los que no les gusta usar demasiados productos, existen cremas faciales multitarea en el mercado que nutren, hidratan y protegen al mismo tiempo.Formulaciones ligeras y eficaces que no dejan la piel grasa porque se absorben rápidamente dando un acabado luminoso y natural.
4) Tratamientos con retinol, para prevenir las arrugas
Otro ingrediente imprescindible en la rutina de cuidado de la piel de mayores de 30 años es el retinol.
Para usar a partir de los 20 años, este derivado de la vitamina A reduce significativamente las líneas finas, el daño solar, las manchas oscuras y las arrugas. Si se aplica constantemente, en forma de suero, mejora la textura de la piel y las funciones esenciales de la epidermis.
Al principio se puede mezclar con crema facial, para que sea menos agresivo, y luego se puede usar puro. La única advertencia: en verano es mejor aplicarlo por la noche porque podría sensibilizar la piel.
5) Cremas y mascarillas para el contorno de ojos, para una mirada siempre luminosa
La piel alrededor de los ojos es la más fina de todo el cuerpo y está constantemente estresada por las expresiones faciales: parpadeamos unas 20 veces por minuto. Por esta razón, las arrugas, las ojeras y las bolsas de "patas de gallo" pueden formarse a una edad temprana.
A partir de los 30 años, el contorno de ojos asegura una mirada fresca y luminosa porque está enriquecido con extractos de plantas con muchas propiedades como la cafeína.
Semanalmente, también se pueden aplicar debajo de los ojos mascarillas en crema o parches con acción iluminadora.
6) Ácidos AHA y BHA para exfoliar y regenerar la piel
Incluso los tratamientos exfoliantes (tanto químicos como mecánicos) no pueden f altar en la rutina de cuidado de la piel de más de 30. Ideal para eliminar las células muertas, los ácidos AHA y BHA que contienen dan mayor luminosidad al rostro, mejoran la textura de la piel, alisan y preparar la piel para tratamientos posteriores.
El exfoliante y el peeling deben usarse una vez a la semana o cada quince días (en caso de pieles sensibles).
7) Ácido hialurónico, el ingrediente imprescindible
Por fin, en una rutina de cuidado de la piel de más de 30 que se precie, nunca puede f altar el ácido hialurónico. Ingrediente esencial para "apagar" la piel, también posee una potente acción tonificante porque rellena las arrugas desde el interior, levantando los contornos del rostro.
Las cremas y sérums que lo incorporan se pueden utilizar por la mañana y por la noche, en rostro, cuello, escote, y suelen caracterizarse por texturas frescas y ligeras, ideales también para el verano.
