La campaña sobre la aceptación del envejecimiento de la modelo Paulina Porizkova, de 57 años, continúa a toda velocidad. Vuelve al tema con su último post que reaviva el debate social: ¿es mejor teñirse o con el pelo blanco?
Paulina Porizkova muestra su cabello blanco (otra vez)
Aunque está en una forma espléndida como lo demuestran sus numerosas publicaciones semidesnudas en Instagram, la supermodelo de casi sesenta años continúa con su misión de difundir y aceptar el paso del tiempo.
Con una piel radiante ligeramente bronceada y súper hidratada siempre está espléndida, pero como ya es costumbre a estas alturas, deja la melena sin tinte claramente visible. Una mezcla de rubio sal/pimienta y rubio ceniza que es el manifiesto perfecto para promover la filosofía del envejecimiento elegante.
¿Nostalgia o aceptación?
«¿Puedo preguntar cómo era, cuando eras joven y hermosa, sentir todas las miradas sobre ti cuando entrabas en una habitación? ¿Te sentiste especial? ¿Extrañas ese sentimiento?” De este comentario de una fan surge la inspiración para volver a hablar sobre la aceptación del cambio de cuerpo y difundir la conciencia, por qué no, también a través de las redes sociales.
«Claro que lo echo de menos», responde, «no es fácil aceptar envejecer en nuestra sociedad. Especialmente cuando toda tu vida ha consistido en lucir como la mujer perfecta" . Así comienza la larga respuesta que ahuyenta el fantasma de la autocompasión.
La belleza imperfecta es más poderosa
«Como modelo, el camino es aún más desafiante, porque siempre habrá alguien que tenga las piernas, la nariz, el cabello más hermosos», continúa, «y cuando no estaba bien conmigo misma todo esto me dolía mucho».Sin embargo, con el tiempo y la experiencia, y con mucho trabajo en sí misma, la histórica supermodelo de los 90 ha cambiado de actitud. Y cuando mira al pasado no siente nostalgia.
En aquel entonces la fuerza destructiva de las comparaciones con otras supermodelos era devastadora, pero ahora todo ha cambiado. “La combinación de lo que he aprendido en el camino, las arrugas que me he ganado, el estado actual de mi físico. Estas son todas las cosas que me llevan a pensar que este es mi mejor momento. ¿Nadie puede ver mi belleza actual? ¡Lo siento por ellos!».
