En la ciudad, el cabello siempre está a prueba por el sol y la contaminación, especialmente en verano. «La exposición al sol induce un proceso de fotooxidación que puede hacer que el cabello sea más sensible a los tratamientos químicos y a la rotura», explica la Dra. Anna Trink, dermatóloga especialista en tricología.
Por lo tanto, la rutina de cuidado del cabello debe ser más específica con productos desintoxicantes y protectores.
Pelo en la ciudad: cómo funcionan la contaminación y el smog
Entre las calles de la metrópoli, la contaminación y los rayos UV dañan el cabello. La exposición diaria a ambientes altamente contaminados “aumenta significativamente el daño oxidativo a nivel folicular, pudiendo causar pérdida de cabello, encanecimiento prematuro y alteraciones estructurales del tallo”, agrega la experta.
Daño solar en el cabello
Por eso, en verano, el cabello es más frágil: «A nivel estético, esta temporada, el cabello parece más seco y el aclarado natural que aparece es en realidad una alarma campana. De hecho, es un foto-daño para ser monitoreado" .
Ojo, por tanto, a planificar sesiones en la peluquería antes de exponerte al sol: «Algunos tratamientos como mechas, balayage, shatush debilitan el cabello porque son fotosensibilizadores. Mejor hacerlos un poco antes de las vacaciones, para no estresar el pelo».
Hiperhidrosis en el cuero cabelludo, los efectos del calor en el cabello
Otra cosa es en cambio si el sol daña el cuero cabelludo: «En este caso, además del picor, aumenta la producción de radicales libres que comprometen la salud del bulbo, provocando su caída», la experta señala.
La hiperhidrosis, es decir, la sudoración excesiva del cuero cabelludo, también puede comprometer la belleza del cabello.
«Se da principalmente en algunas zonas de la cabeza, sobre todo en las laterales y posteriores. El cabello aparece grasoso y, a menudo, se siente una sensación de picor. Además, se modifica la película hidrolipídica del cuero cabelludo, limitando su capacidad bacteriostática con la consiguiente sensibilización de la zona" .
La rutina de cuidado del cabello para el verano
«La higiene es muy importante para eliminar las micropartículas contaminantes que, si persisten durante días en contacto con nuestra piel, desencadenan un proceso inflamatorio», continúa la experta.
Por eso, desintoxicar e hidratar son las consignas de la temporada.
También no se debe subestimar «el uso de peines o cepillos delicados con cerdas de diferentes longitudes para reducir el riesgo de rotura del cabello y protectores de cabeza hechos con telas anti-UV».
Comida, cómo cambia
No menos importante, debe ajustar la fuente de alimentación. «Necesitamos reducir las grasas saturadas y los azúcares refinados, favoreciendo la ingesta de agua para mantener la hidratación y fibras para ayudar a equilibrar la microbiota intestinal», explica la experta.
«Los minerales que sustentan la estructura de la piel y el cabello y los ácidos grasos mono y poliinsaturados contenidos en los frutos secos y el aceite de oliva son esenciales. Los antioxidantes, por su parte, presentes en los frutos rojos, el cacao y las crucíferas, controlan la producción de radicales libres inducidos por los rayos UV" .