Firmemente en la cima del éxito de The Crown 4, Emma Corrin ella es muy generosa con los fans y siempre comparte nuevos y suculentos tomas entre bastidores de la serie de Netflix en la que juega Princesa Diana.
El último homenaje irresistible de la estrella inglesa la ve feliz entre las portadas que la retratan, luchando con el vestido de novia real, entrenando en patines y relajándose con el tejido en el plató. Pero el verdadero spoiler proviene directamente del departamento de belleza.
Ya es oficial: el peinado de Emma Corrin / Lady Diana está inspirado en el de George Micheal, quien era una estrella mundial con Wham! en ese momento.
Emma Corrin como las estrellas de los 80
Estilo diurno preppy chic basado en faldas de cachemira y tartán, suntuosos vestidos de tafetán principesco para ocasiones oficiales. La diva rebelde Emma Corrin es una Lady Diana elegante y subestimada. Desde el punto de vista estético, sin embargo, fue su cabello lo que causó sensación casi de inmediato, un detalle extremadamente preciso también en la serie de Netflix.
No es casualidad que el cabello de los protagonistas de The Crown 4 juegue un papel crucial en el éxito de la serie. Entre los diversos momentos lúdicos y relajados detrás de escena, entre descansos relajantes y ensayos de vestuario, la estrella de 24 años también revela la referencia de su cabello de princesa inglesa al estilo de los ochenta: George Micheal.
Lady Diana y olas pop
La referencia es muy acertada. En ese tiempo George Michael ya era muy famoso con el grupo de ¡Wham! y decretó los estilos y volúmenes del cabello en todo el Canal y mucho más allá. Especialmente en 1984 y 1985 (en el corazón de los años Tatcher) cuando la estrella del pop británico de origen griego se dejó crecer el cabello y lo usó en un peinado oxigenado y ondulado, esculpido con trazos de laca en spray.
Por tanto, es natural que incluso el pelo de la protagonista de The Crown 4 haya pasado por este peinado voluminoso y ondulado. En matices de rubio platino y con un rebrote matizado pero deliberadamente perceptible. En tiempos de renovada manía Lady Diana como estos, una idea nada despreciable de la que hablar de inmediato con el peluquero.