Un gesto diario de la rutina corporal, los desodorantes se encuentran entre los productos indispensables de todos. A menudo delicadamente perfumadas, ayudan a controlar los malos olores causados por la transpiración y la flora bacteriana, por lo que deben elegirse con cuidado.
«Además del formato, es importante verificar que sean hipoalergénicos para no causar irritación», explica el Dr. Gianluca Mio, especialista en Dermatología del Centro Médico Primus Forlì.
Desodorante, cómo actúa contra la transpiración
La transpiración corporal tiene una función precisa: regular la temperatura corporal. Las responsables de esta actividad son las glándulas sudoríparas que, para proteger al cuerpo del sobrecalentamiento, dispersan el calor y eliminan las toxinas.
«Es en este contexto que se puede formar el mal olor por acción de la flora bacteriana que entra en contacto con el sudor, que por naturaleza es inodoro», continúa el Dr. Mio.
En contacto con la piel, los desodorantes activan procesos químicos y físicos: «La mayoría de estos contienen tanto ingredientes que ejercen una acción bacteriostática como inhibidores enzimáticos que actúan sobre los microorganismos de la flora bacteriana, impidiendo la degradación del sudor.
Las formulaciones pueden contener sustancias absorbentes que capturan las moléculas olorosas, impidiendo que se propaguen, pero también sustancias antitranspirantes que actúan sobre la cantidad de sudor secretada por las glándulas sudoríparas, ayudando a limitar la producción de malos olores.
Cuidado, eso sí, porque algunas de estas sustancias podrían fotosensibilizar la piel, por lo que sería mejor evitar aplicar desodorante antes de ir a la playa», explica la Dra. Mio.
Ingredientes antiolor, cuáles buscar en el desodorante
Elegir el desodorante adecuado no es tan sencillo, empezando por los ingredientes. Generalmente, los desodorantes contienen éter triclorohidroxidifenílico (Triclosan), clorhexidina (Clorhexidina) y farnesol (Farnesol), que son esenciales porque tienen acción bacteriostática.
Seguidamente se añaden ingredientes con una ligera acción antimicrobiana y una agradable fragancia como limoneno, bergamota u otras fragancias muy frescas que acentúan la sensación de bienestar.
Formulaciones analérgicas con pH neutro
«Cuidado con los principios activos de origen natural, porque pueden ser alergénicos. Normalmente la sustancia que con más frecuencia desencadena esta reacción es el perfume, pero las posibles irritaciones también pueden ser provocadas por aceites esenciales, alcohol y aditivos biológicos, así como de origen químico. Es por esto que, en sujetos predispuestos, puede presentarse enrojecimiento, picor y descamación».
Pero también pueden causar eccemas, dermatitis atópica o de contacto. “Por eso, a la hora de elegir un desodorante es importante evaluar los ingredientes que contiene y optar por formulaciones con pH neutro que no interfieran con el equilibrio fisiológico de la piel”, explica la experta.
Sales de aluminio, ¿sí o no?
«No desaconsejo los desodorantes con aluminio, sales de aluminio y parabenos: estas sustancias pueden ser nocivas dada la proximidad de las axilas a las glándulas mamarias».
Cuáles elegir para los que hacen deporte
«A la hora de hacer deporte es mejor evitar un desodorante antitranspirante porque bloquea la actividad de las glándulas sudoríparas. También te recomiendo prestar atención a la ropa que llevas, evitando los tejidos sintéticos que aumentan la transpiración y los malos olores" .
¿Spray, stick, roll-on o crema?
La elección del formato depende de tus preferencias personales: «El desodorante en spray se distribuye de manera más uniforme a diferencia del desodorante en barra que entra en contacto directo con la piel.
El formato roll-on es más ligero en rendimiento pero más gordo en formulación por lo que tiende a manchar la ropa; el desodorante en crema requiere una aplicación más precisa y, al extenderlo con las manos, provoca una mayor dispersión del producto.
Por último, los desodorantes antitranspirantes son productos cosméticos que "bloquean" temporalmente la actividad de las glándulas sudoríparas, reduciendo la sudoración. Están especialmente indicados sólo en caso de transpiración excesiva" .