Los tratamientos más lujosos para el cuidado de la piel resisten las tendencias del momento, confirmándose como indispensables: oro, plata, platino, polvo de diamante. Desde metales preciosos hasta los ingredientes más raros, el cuidado de la piel es un verdadero lujo.
Cuidado de la piel y cosmética joya: super star gold
Si la plata, cicatrizante y antibacteriana, tiene un papel de apariencia, en el cuidado de la piel la estrella indiscutible es el oro.

«Ideal para todo tipo de pieles, este antioxidante natural es una panacea para las más maduras y desvitalizadas que pierden su luminosidad con la menopausia.Además de potenciar la eficacia de los principios activos a los que se asocia, la luz reflejada aumenta la temperatura de la piel, favoreciendo la microcirculación y mejorando la transparencia del cutis», explica Gelsomina Perri, farmacéutica y directora de Monteil Cosmetics Italia.
Cómo funciona el oro en el cuidado de la piel
Hay una sustancia que potencia el metal precioso: la vitamina C. «Es el fósforo que lo enciende, estimulándolo para relanzar la producción de elastina y colágeno y para proteger el ADN de las células» continúa Perri que subraya como, cuando se trata de ingredientes lujosos, tienes que leer la etiqueta cuidadosamente.
«Si en la etiqueta aparece el término “oro” o “aurum”, significa que el elemento ha sido añadido a la fórmula en forma pura, sin sufrir ninguna manipulación, y sus partículas son visibles a simple vista » . Al igual que el de la joyería, de verdad.
Pero la variante que se usa a menudo en aceites, cremas, sueros es coloidal.«En este caso sus partículas, solas o mezcladas con otras de platino, plata o incluso cobre, se reducen a un polvo finísimo y se introducen en un líquido muy puro, generalmente agua destilada, y mediante un particular proceso de laboratorio se vuelven orgánicas con el fin de para ser asimilado por la piel» especifica la cosmetóloga Miriam Deola.
Oro, ¿en qué fórmulas?
«Son emulsiones muy ligeras para pulverizar sobre el rostro y el cuerpo en cualquier momento del día, sobre el maquillaje o incluso antes del sol porque además de iluminar frenan la formación de manchas. El resultado cosmético, inmediatamente visible, se fortalece con el tiempo, dando una nueva frescura al rostro» resume Gelsomina Perri.
Mascarillas cosméticas de oro, cómo funcionan
Las máscaras joya están hechas con láminas impalpables. Prepararlos es sencillo. Después de limpiar la piel, recoger las hojas una a una con la ayuda de unas pinzas y colocarlas sobre el rostro y el escote de forma que cubra completamente la zona.
Golpea ligeramente el papel de seda antes de retirarlo para que se adhiera bien a la piel. Seis láminas de 8×8 cm serán suficientes para cubrir toda la zona afectada, incluido el contorno de ojos y labios.
Dejar actuar de 10 a 20 minutos, masajeando ligeramente para eliminar los posibles residuos, aplicando también una ligera exfoliación y utilizando un desmaquillador ligero, eliminar los restos. Si temes una alergia, primero hazte una prueba de parche.
Polvos y piedras preciosas para el cuidado de la piel de lujo
La eficacia de los ingredientes de las joyas suele ser una cuestión de micras. «Los microcristales de nácar que produce la ostra, según su tamaño, pueden hacer que la tez esté radiante por la refracción de la luz o convertirse en exfoliantes alisantes», continúa Deola.
«Los polvos micronizados de diamante y esmeralda pueden tener un efecto de relleno, rellenando las microarrugas, o estimulando eficazmente la renovación de la piel. El zafiro, en cambio, alivia las rojeces" .
Los masajes más preciados
Entre los tratamientos de lujo, masajes faciales y corporales con polvo de diamante mezclado con aceites preciosos, caviar o trufas, para un efecto luminoso inmediato.
«La gema micronizada, compuesta de carbono puro como el carbón, es desintoxicante y mantiene a raya la producción sebácea, además contiene oligoelementos que activan la microcirculación» concluye la cosmetóloga.
Cobre
Terminemos con el cobre, del que se han podido obtener péptidos especiales que aceleran la cicatrización, reducen la inflamación y aumentan la carga inmunitaria.
La magia es la fermentación: al combinar el metal con extractos de arroz, plantas, raíces y pétalos trabajados junto con levaduras y bacterias, transforma las fórmulas en bombas antioxidantes. No los encuentras en las joyas, pero tu piel te lo agradece.